martes, 14 de septiembre de 2010

SHOWROOM DUMMIES



Muchas veces nos olvidamos de la importancia de los maniquíes y de lo determinantes que pueden llegar a ser en un escaparate. Si nos remontamos un poco en la historia podemos ver que al principio éstos eran simples bustos sin expresión alguna que luego han ido evolucionando y que con los avances en las técnicas de producción fueron cobrando más realismo, siguiendo siempre la moda y el gusto de la época. En la actualidad la tendencia un poco es la del "todo vale" y maniquíes figurativos conviven con otros más abstractos. Los modelos que más me han gustado últimamente han sido los de Prada, realizados en fibra de vidrio sin pintar, con unas cabezas cuya expresión nos recuerda a las máscaras mortuorias y que resultan de lo más delicado e inquietante.




Lo que también hace interesante este tipo de maniquí es que se pueden usar sin cabeza o bien colocando una diferente para darle una apariencia distinta. Esto es lo que vemos en este escaparate de Prada en San Francisco, en el que para los maniquíes de hombre se ha optado por unas cabezas tipo sastre en tela, completamente neutras y que le dan cierto aire surrealista que nos hace pensar en las pinturas de Giorgio de Chirico.



Por otro lado, Emporio Armani, en su tienda de Rodeo Drive en Los Angeles, presenta estos maniquíes realizados en Plakene que me llamaron la atención por ser articulables y por el detalle en sus acabados, que demuestran un gran diseño técnico. La cualidad del material con el que están fabricados hace que destaque más la ropa que el maniquí, lo cual me parece interesante, y aunque el acabado resulta un poco frío, para la estética minimalista de esta tienda funciona bien.





Showroom Dummies es el título de una de las canciones incluidas en el álbum Trans-Europe Express publicado por el grupo alemán Kraftwerk en 1977. Esta canción habla de unos maniquíes que se escapan del escaparate y se van a bailar por Europa. Considerados los padres de la electrónica, este grupo que popularizó el género, siempre ha tenido una cuidada estética que se ha caracterizado por su gelidez robótica y deshumanizada. De esta manera los podemos ver en este videoclip en el que emulan a unos maniquíes y que grabaron en 1982 aprovechando la re-edición del disco.

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